Con un mensaje de esperanza y alegría, celebraron la Navidad en forma interna, los niños de la Sala Cuna “Cindy” del Hospital Dr. Eduardo Pereira Ramírez (HEP) de Valparaíso, quienes acompañados de sus tías educadora y asistentes, cantaron y bailaron canciones navideñas en dependencias del establecimiento educacional, cumpliendo con el aforo establecido y las medidas sanitarias y de higiene de las cuales los pequeños ya se encuentran habituados.

Así lo señaló la directora (s) de la sala cuna, Catherine Yáñez San Martín, quien detalló que pese a  lo duro y difícil que ha sido el año 2020, debido a la pandemia, y a todas las restricciones que ha implicado, el plantel nunca dejó de funcionar y mantuvo un aforo de 6 niños de atención presencial.

Los hijos e hijas de funcionarios del HEP, cuyas edades fluctúan entre los 0 y 2 años de edad, han sido cuidados y atendidos desde abril de 2020 por turnos rotativos integrados por el personal de la sala cuna que permanece activo con trabajo presencial, constituidos por un equipo total de 2 educadoras de párvulos y 7 asistentes.

La directora (s) del “Cindy” comentó que al principio de esta nueva modalidad “lo que más llamó la atención de los niños fue que las tías estábamos con mascarillas y otros elementos de protección personal; como ellos no comprenden que estamos en una pandemia, intentaban sacarnos las mascarillas, pues a esa edad se comunican mucho a través del contacto físico, los abrazos, los besos y fue muy difícil también para nosotras restringir esa parte”.

Agregó que de todas maneras, “las familias nos han colaborado mucho en todas las medidas y protocolos que tenemos que seguir y gracias a ello, los niños y niñas hoy ya están acostumbrados a que usemos mascarillas”.

Explicó que gracias a la tecnología, las educadoras han podido compartir las actividades de los pequeños con sus padres y apoderados, a través de videos y de videollamadas. Ese fue el caso del acto navideño realizado esta semana por la sala cuna, el cual dentro de su simpleza y aforo acotado, fue disfrutado por las familias de los niños y niñas, dada la alegría y entusiasmo de los pequeños.

El equipo de la sala cuna “Cindy” agradeció a los padres y apoderados la confianza depositada en el establecimiento y su colaboración, ya que según expresaron, este ambiente de recíproca comprensión permitió desarrollar las actividades sin contratiempos para los menores. Incluso ninguno registró enfermedad alguna durante el período y en esta semana prenavideña, ellos son los que han aportado alegría y entusiasmo a las tías, según comentaron.